En esta autobiografía, Marcel Reich-Ranicki narra su vida desde su infancia en Polonia hasta su destacada carrera como crítico literario en Alemania. El libro ofrece una visión profunda de sus experiencias durante el Holocausto, su trabajo como comunista en la Polonia de la posguerra y su posterior regreso a Alemania, donde se convirtió en una figura influyente en el mundo literario. Reich-Ranicki reflexiona sobre la dualidad de su relación con la cultura alemana, marcada tanto por el amor a su literatura y música como por el horror de su barbarie. Un relato conmovedor y perspicaz de una vida extraordinaria.