Mère et filles es una novela de Madeleine Chapsal, publicada en 1992. Esta crónica familiar explora la evolución de las costumbres burguesas, la fragmentación y reconstrucción de las familias, y la redescubierta maternidad por las feministas de los años 70. Los personajes se dedican a rehacer sus vidas, abordando temas como divorcios y embarazos inesperados, incluso la madre viuda encuentra un nuevo matrimonio. La novela destaca la fuerza de las relaciones madre-hija y la rivalidad entre hermanas.