En la Inglaterra del siglo XIX, Amelia Willoughby ha estado comprometida con el Duque de Wyndham desde que era una bebé. Literalmente. Con solo seis meses de edad cuando se firmaron los contratos, ha pasado el resto de su vida esperando a Thomas Cavendish, el duque. Pero mientras lo observa desde lejos, tiene la sospecha de que él nunca piensa en ella. Thomas, por su parte, disfruta teniendo una prometida, ya que esto mantiene alejadas a las cazadoras de maridos, y tiene la intención de casarse con ella...eventualmente. Pero justo cuando empieza a darse cuenta de que su prometida podría ser algo más que conveniente, el mundo de Thomas se ve sacudido por la llegada de su primo perdido hace mucho tiempo, quien podría ser el verdadero Duque de Wyndham. Y si Thomas no es el duque, entonces no está comprometido con Amelia. Lo cual es la broma más cruel de todas, porque este arrogante e ilustre duque ha cometido el error de enamorarse... ¡de su propia prometida!