En este roman autobiográfico, Jean-Marie Rouart reflexiona sobre el misterio del destino y trata de comprender sus secretos mecanismos. El autor se desnuda emocionalmente y confiesa sus debilidades: una adolescencia con un futuro incierto, un bachillerato suspendido repetidamente, el amor por una joven que le es infiel, y la mediocridad de soñar más allá de sus posibilidades en una modesta habitación. ¿Qué conjuro puede romper el maleficio? ¿Cómo pasar de la pobreza entre los pescadores de Noirmoutier a codearse con los afortunados del mundo, de la humillación de los libros rechazados a la prestigiosa Académie française? El amor, con su crueldad y sus embriagueces, marca un relato ágil y mordaz en el que se alternan romanticismo y humor.