Este libro de Enrique Gervilla Castillo explora la relación entre la postmodernidad y la educación, centrándose en los valores y la cultura de los jóvenes. Analiza cómo los cambios sociales y culturales influyen en la educación y en la formación de los jóvenes en la sociedad actual. El libro es una reflexión sobre los desafíos y las oportunidades que presenta la postmodernidad para el ámbito educativo.