Este libro de Eduardo González Calleja explora la movilización y protesta estudiantil en España desde 1865 hasta 2008. Analiza la discontinuidad y fragmentación de la movilización escolar, su ámbito restringido y la diversidad de intereses en la comunidad universitaria. El autor propone tipos ideales de movilización estudiantil y examina su evolución en paralelo a los cambios políticos, sociales y culturales que han afectado a las instituciones educativas contemporáneas.