En 'Segismundo y compañía', una pareja de espectadores que acude a ver una obra de teatro por equivocación, insiste en que es mejor representar una pieza más divertida. Proponen al actor principal y a toda la sala improvisar una de piratas, donde no falten palmeras, luchas, loros y, por supuesto, un cofre del tesoro. Así, todos acaban jugando al teatro dentro del teatro, creando una experiencia única y participativa.