En 'Si los muertos no resucitan', Philip Kerr nos sumerge en una trama de novela negra histórica protagonizada por el detective Bernie Gunther. La historia se desarrolla en dos épocas distintas: el Berlín de 1934, donde Gunther trabaja como detective en el Hotel Adlon mientras investiga el creciente antisemitismo y los preparativos para los Juegos Olímpicos, y la Habana de 1954, bajo el régimen de Batista, donde Gunther se reencuentra con viejos fantasmas y se ve envuelto en una nueva intriga. Con su estilo cínico y su impecable ambientación, Kerr nos ofrece una visión fascinante de la corrupción y los dobles juegos en tiempos convulsos.