En Smoke Screen, la periodista Britt Shelley se despierta y se encuentra en la cama con Jay Burgess, un detective estrella del Departamento de Policía de Charleston, sin recordar cómo llegó allí ni cómo Jay terminó muerto. Jay, un hombre apuesto y fiestero, fue uno de los cuatro heroicos funcionarios de la ciudad que arriesgaron sus vidas cinco años antes para poner a salvo a otros de un incendio catastrófico. Raley Gannon, amigo de toda la vida de Jay, fue asignado posteriormente para investigar el incendio, pero nunca terminó la investigación debido a un escándalo. Ahora, la periodista cuya información sesgada contribuyó a la caída de Raley podría ser su única oportunidad de reivindicarse y obtener justicia para las víctimas del incendio. Sin embargo, cuanto más descubren Raley y Britt sobre aquel fatídico día, más peligrosa se vuelve la situación, hasta que no solo persiguen la verdad, sino que huyen por sus vidas.