En este libro, Michèle Morgan comparte momentos felices y encuentros excepcionales, revelando su filosofía de vida. A través de historias personales y encuentros con seres diferentes, animales y objetos, Morgan nos muestra cómo aceptar y amar incondicionalmente a los demás puede conducir a un crecimiento personal y a descubrir la esencia de la vida. Un relato sincero y conmovedor que invita a la reflexión y al autodescubrimiento.