Siri Bergman, una psicóloga de 34 años, trabaja en Estocolmo. Tras la muerte de su marido, vive sola en una cabaña aislada. A pesar de sus esfuerzos por seguir adelante, siente que alguien la observa a través de las ventanas por la noche. Su gato desaparece y recibe fotos inquietantes de sí misma. Una de sus pacientes aparece muerta, dejando una carta agradeciendo a Siri por ayudarla a comprender que su vida no tenía sentido. El mundo de Siri se derrumba, y la sensación de ser vigilada se intensifica, planteando la pregunta de si hay otra explicación detrás de todo.