Lambert Strether, un hombre de mediana edad, es enviado desde Massachusetts a París por la señora Newsome para recuperar a su hijo Chad, quien se ha visto envuelto en un estilo de vida europeo que ella desaprueba. Sin embargo, al llegar a París, Strether queda cautivado por la ciudad y su encanto, lo que le hace cuestionar su misión original y replantearse sus propios valores y deseos. La novela explora temas como el choque cultural, la libertad personal y la búsqueda de la felicidad.