En la segunda novela de Jack Taylor, un ex policía caído en desgracia en Galway, se enfrenta a una serie de asesinatos de miembros de la comunidad itinerante. A pesar de su estado de desesperación alcohólica, Jack posee una habilidad única para encontrar pistas y hacer las preguntas correctas, incluso cuando la policía irlandesa se muestra reacia a investigar. Esta novela negra, llena de actitud y suspense, sumerge al lector en un thriller donde la intriga y la crudeza se entrelazan en cada página.