Descubre la conmovedora historia de Harry Patch, el último soldado británico que luchó en las trincheras de la Primera Guerra Mundial. A través de sus recuerdos vívidos, Patch nos transporta a su infancia en la campiña de Somerset y a los horrores del frente, donde fue testigo de la muerte de muchos compañeros. Este libro relata su experiencia en la Batalla de Passchendaele, su participación en un motín tras el Armisticio y su labor como bombero durante la Segunda Guerra Mundial. Un relato extraordinario de un hombre común que vivió una vida excepcional.