En el Londres de 1914, Feliks, un anarquista ruso, llega con la misión de asesinar al príncipe Orlov, un enviado del zar Nicolás II. Su objetivo es frustrar un tratado secreto entre Rusia e Inglaterra que podría desencadenar la Primera Guerra Mundial. Sin embargo, su plan se complica al descubrir vínculos inesperados con su pasado y al enfrentarse a la inteligencia británica, liderada por Lord Walden y el joven Winston Churchill. En una carrera contrarreloj, Feliks deberá decidir entre su idealismo revolucionario y los lazos personales que lo unen a sus enemigos.