En 'La Tumba de Dios', Richard Andrews y Paul Schellenberger aplican la lógica matemática al misterio de Rennes-le-Château y el 'tesoro' que supuestamente está enterrado allí. Comenzando con un sano escepticismo, asumieron que el enigma se marchitaría bajo escrutinio. La búsqueda comenzó con una investigación sobre las actividades de un grupo de sacerdotes del siglo XIX, pero a medida que se avanzaba en el camino, se hizo evidente que el alcance del misterio se extendía mucho más allá de las montañas del sur de Francia. Una serie de pinturas, mapas y lápidas apuntaban a un lugar muy específico. Los autores combinaron sus conocimientos de arqueología, teología y topografía para producir un relato sorprendente de lo que creen que son los verdaderos acontecimientos que rodearon el entierro de Jesús.