En el año 1153, Sicilia está bajo el dominio normando, pero impregnada de la cultura y la lengua árabes. Palermo, la capital, rivaliza con Bagdad y Córdoba en esplendor, con una corte multicultural. La novela histórica 'Un sultán en Palermo' entrelaza orgullo, codicia, nobleza y grandeza de espíritu en este contexto fascinante.