En 'Una mujer desnuda', Lola Beccaria nos presenta a Martina Iranco, una joven que desde la infancia aprende que el afecto tiene un precio. A medida que crece, Martina se construye una fachada impecable mientras satisface su necesidad de cariño a través de besos y caricias ocultas. La novela explora la urgencia vital por conseguir afecto, cómo aprendemos a ganarlo y cómo podemos perdernos en esa búsqueda, mostrando la piel como un lugar donde se escribe el propio desarraigo. Una reflexión sobre la paradoja de sentir para no sentir y la dificultad de vivir con las manos vacías.