Cari Christensen ve a Max Angeli en una discoteca y, antes de que pueda siquiera pensar en lo perfecto que es, él la saca del local y la sube a su coche. Cuando Max se da cuenta de que Cari no es su cita a ciegas, ya se está enamorando de ella. A pesar de pertenecer a mundos diferentes, Cari le muestra un lado de la vida que él no conocía, y él no puede evitar sentirse encantado. ¿Podría ser que unir sus mundos no sea una mala idea después de todo?