Una conmovedora historia de exilio y desarraigo, 'Une poignée de gens' de Anne Wiazemsky narra la vida de niños que crecen lejos de su Rusia natal, adoptando nuevas nacionalidades y enfrentando los desafíos de la identidad en un mundo cambiante. La novela explora temas de pertenencia, memoria y la búsqueda de raíces en un contexto de exilio y adaptación cultural. Ganadora del Grand Prix du Roman de l'Académie Française en 1998.