Zeruko Argia 80 ejemplares años 1963-1964
Este excepcional lote está compuesto por 80 ejemplares del diario Zeruko Argia de los años 1963-1964, es decir del inicio de la época estable tras la guerra civil.
El lote está compuesto por los siguientes ejemplares:
Año 1963 (32 ejemplares): 2, 3, 4, 5, 6, 7, 8, 9, 10, 11, 13, 15, 16, 17, 18, ¿19? (Hay un error de numeración ya que aparece numerado nuevamente como 18) 21, 22, 23, 28, 30, 31, 32, 33, 36, 37, 39, 40, 41, 42, 43, 44.
Año 1964 (48 ejemplares): 45, 46, 47, 48, 49, 50, 51, 52, 53, 54, 56, 57, 58, 59, 60, 61, 62, 63, 64, 65, 66, 67, 68, 69, 70, 71, 72, 73, 74, 75, 76, 77, 78, 80, 81, 82, 83, 84, 85, 86, 88, 89, 90, 91, 92, 93, 95, 96,
Buen estado de conservación. Papel amarilleado por el paso del tiempo pero totalmente natural en este tipo de papel. Por lo demás (a excepcion del número 2 que su primera página presenta deterioros como se puede apreciar en la foto adjunta) muy buen estado de conservación, sin rotos, garabatos o faltas. Cada ejemplar 6 u 8 hojas.
Hay abundante información de actualidad, pero especialmente información relativa a cultura vasca, con reportajes sobre bertsolarismo, etc.. En muchos de los números que ofertamos se puede leer una columna del excelente bertsolari Basarri.
Escucharía ofertas, serias, por numeros sueltos o lotes de dos o mas ejemplares.
Tomado de wikipedia:
"El uno de enero de 1919, los capuchinos de Pamplona publicaron el primer ejemplar de Zeruko Argia (Luz del cielo en euskera), bajo la dirección del capuchino Damaso Intza. Era una revista mensual con carácter religioso, de formato pequeño. En 1921, en San Sebastián crearon otra revista llamada 'Argia', esta también en euskera pero sin tener ese carácter religioso. Durante años fueron los únicos medios escritos solamente en euskera, pero entre las dos publicaciones, en vez de competencia, había un espíritu de cooperación. La Guerra Civil Española interrumpió por primera vez la labor de las dos revistas, y al mismo tiempo, la labor del periodismo en euskera.
Terminada la guerra, tuvieron que trascurrir más de 15 años para que se publicara otro ejemplar. En la década de los 50 se hicieron unos cuantos intentos para rehabilitar Zeruko Argia, pero solo vieron la luz un par de números. La revista se afianzó en 1963 siendo la heredera de las dos anteriores revistas: por un lado, tomó como nombre Zeruko Argia y estaba en manos de los capuchinos; por otro, el aspecto y la frecuencia eran del viejo Argia, y los temas religiosos eran cada vez menos frecuentes, aunque la foto de la primera portada del año 1963 fuera la del Papa.
Zeruko Argia era lugar de encuentro de escritores, músicos, pensadores y, en resumidas cuentas, de la gente relacionada con la cultura vasca. Aún y todo, en los años 1960, eran pocas las firmas que tenían una prestación y estilo periodístico. Era más una colección de opiniones que un producto periodístico.
En 1972 crearon la sección Zenbat Gara (Cúantos somos en euskera). Aquí se escribían las noticias relacionadas con Euskal Herria y la cultura vasca en una forma más dinámica. Una nueva generación de periodistas empezó a escribir en la revista, creando un estilo periodístico en lengua vasca. La transición del fondo también tuvo su transformación en la forma, en 1976 aquella revista con forma de gran periódico se convirtió en magazine. El primer número de aquella revista con una nueva cara reflejaba bien uno de los temas que estaban al rojo vivo, una foto en color de la central nuclear de Lemóniz. De hecho, 1976 fue nombrado como el año del periodismo vasco. Aquellos años personas como Rikardo Arregi, Xabier Lete, Joseba Sarrionandia, Ramón Saizarbitoria, Bernardo Atxaga, Mari Karmen Garmendia y Elixabete Garmendia escribían en el semanal, entre otros.
El 2 de marzo de 1976 (número 686) Zeruko Argia consiguió pasar la censura y publicó las fotos de Amparo Arangoa Satrustegi después de ser torturada por laGuardia Civil. Aquellas fotos crearon una gran conmoción tanto en el País Vasco como fuera de éste. Cada vez los temas políticos eran más frecuentes en las páginas de este medio, reflejo de la situación en la sociedad vasca.
Zeruko Argia poco a poco se estaba sumergiendo en una crisis, donde en aquellos años se discutía si los medios solo en euskera podían tener un sitio o no.
A finales de la década de los 70, la mayoría de los periodistas de Zeruko Argia se fueron a los recién creados diarios bilingües Egin y Deia. Así, quedaron cinco personas para hacer la revista.
En 1980 los capuchinos dejaron la propiedad de la revista en los trabajadores que hacían la revista, y éstos, abandonaron por completo la senda religiosa por donde se estaban alejando poco a poco. Le cambiaron el nombre, y desde entonces, la revista Zeruko Argia (Luz del cielo) pasó a ser solo Argia (Luz). Fueron tiempos difíciles económicamente para la revista, y después de estar en la calle semana tras semana desde 1963, unas semanas llegaron a no poder publicarla por no tener papel."