- Richard Dawkins tenía quince años cuando dejó de creer en Dios. Profundamente impresionado por la belleza y la comple¡jidad de los seres vivos, estaba convencido de que tenía que existir un diseñador. Sin embargo, cuando empezó a estudiar biología evolutiva cambió de opinión. Ahora, en Ateísmo para principiantes, uno de los mejores y más exitosos divulga¡dores de ciencia del mundo ofrece a sus lectores, jóvenes y adultos, la misma oportunidad de replantearse algunas de las cuestiones más importantes: ¿Cree usted en Dios? ¿En cuál? ¿Hemos de ser religiosos (o al menos es aconsejable) para así portarnos bien con los demás?