Los ingleses y otros temas. José Gómez Salvago. Editora Nacional. Primera edición. 1970.

Los ingleses y otros temas. José Gómez Salvago. Editora Nacional. Primera edición. 1970.El ensayo más largo del libro está dedicado al tema de los ingleses. La verdad es que, hasta últi-mamente, los españoles, como en general todos los europeos continentales, sabíamos poco de Inglaterra y de su cultura. Nosotros pertenecemos a las generaciones que han tenido que acostumbrarse en edad adulta al uso del inglés. El inglés lo sabian desde hacia mucho los financieros y los aristócratas, pero, por ejemplo, en los congresos científicos se usaba mucho más el francés y también el alemán. Los ingleses y norteamericanos hace veinte o treinta años no daban por supuesto que les enten. dieran si usaban exclusivamente su lengua, Sin ne. gar, naturalmente, el prestigio y la importaneia que ya hace mucho tenía Inglaterra, quiad por aus mis. mos triunfos en la política y en los negocios no era tal ves suficientemente apreciada en la cultura.Cuando uno penetra más en la cultura anglosa-jona, se queda asombrado de saber que la Igla-terra de los más bárbaros siglos medievales era una luminaria cultural del Occidente, y allí se traducía a San Isidoro y hasta había sabios que conocían a Platón en griego. Filósofos ingleses medievales como Guillermo de Oceam, son tan importantes, que preceden con muchos siglos a los pensadores de esa cultura anglosajona que ha dado a su lengua hoy el predominio del planeta.Y aunque muchas de las etapas que han llevado a los ingleses a ser los maestros - yo creo que aún insuperados, en la organización y convivencia política-- se recorrieron en antagonismo con nuestra España, yo creo que los ingleses merecen ser cono. cidos y estimados. La misma filosófica sabiduría, adornada con el desgarro de minifaldas y beatles, con que la Inglaterra actual acepta su sustitución en las grandes ambiciones mundiales, tiene sus aspectos admirables. Agradezcamos a este andaluz bien arraigado en su provincia y en su pueblo su actitud de hombre culto y comprensivo, que observa los problemas y cambios de su época, y no sólo los siente, sino que los analiza.