Corchado Soriano, Manuel: La Orden de Calatrava, Ciudad Real, Instituto de Estudios Manchegos, 1984, Rústica con solapas, 3 Vol,, I: 272 pág, 6 estados pelgados, II: 469 pág, III: 567 pág, + 5 hojas, 24x17
Monumental trabajo
I La Orden de Calatrava y su campo
II Las Jerarquías de la Orden con rentas en el campo de Calartrava
III El campo de Calatrava. Los pueblos
En las páginas que siguen a continuación, tanto el erudito, el historiador como el lector curioso, encontrará toda la trascendencia que tuvo este ínclito nombre de Calatrava en la historia de nuestra tierra. Esta Orden, que conquistó, colonizó y administró la mayor parte de la Mancha a lo largo de siglos. Esta Orden que construye, después de la Batalla de las Navas de Tolosa, la más importante fortaleza de Castilla en el Cerro del Alacranejo, mirando a Sierra Morena: el Sacro Convento y Castillo de Calatrava la Nueva, fortaleza, convento y basílica cuyas ruinas, hoy en consolidación, asombran y admiran al visitante. Hasta allí en famosa procesión con la Virgen llamada de los Mártires, y los restos de los Maestres y los caballeros muertos hasta entonces al frente, fue la hueste de Calatrava hasta su nueva sede desde aquel castillo de Kalaat-Rawaah que le dió nombre y que abandonan definitivamente. Desde esta Calatrava la Nueva se administraron los cuarenta y tres lugares, villas y ciudades manchegas de la Orden. Desde allí se impartió justicia. Desde allí salió la mesnada calatraveña una y otra vez, a la conquista del resto de España y ellos llevaron el pendón blanco de Calatrava hasta la misma Granada en 1492. Esta mesnada que admiraba por su bravura y su fé, y que luego, humildemente, se arrodillaba y cantaba el Te Deum en acción de gracias por sus victorias. Esta mes-riada que hacía exclamar, en frase histórica: “son leones en la batalla y corderos en el coro...”.