El sentido del diálogo. Jean Lacroix. Colección pensamiento número 11. Editorial Fontanella. Tercera edición. 1968.Los que no son capaces de dialogar suelen ser fanáticos; se desconocen así mismos tanto como desconocen a los demás. Uno no llega a conocerse más que por mediación de otro; al destruir el diálogo se destruye tanto uno asimismo como al prójimo. Si se analiza entonces lo que implican ese sentido del prójimo y esa voluntad de diálogo, descubriremos enseguida toda la filosofía. Según Hegel, el hombre comienza por una opinión personal, más o menos coherente, que denomina mito. Es la etapa del monólogo… Pero las opiniones empiezan pronto a chocar, el mito choca con otros, los monólogos se enfrentan. Bajo una u otra forma, es el triunfo de la violencia. Pero a veces también sucede que, en lugar de imponer sus opiniones por la fuerza, los hombres los enfrentan y las discuten. Es el tránsito del mito a la ciencia, del monólogo al diálogo… Ya no se obliga más al otro al que piense como uno mismo, se trata de convencerlo.