El libro plantea un nuevo modelo de catequesis que no se limite a unos pocos, sino que implique a toda la comunidad cristiana: parroquia, familias, grupos de base y fieles en general. Huebsch propone una catequesis intergeneracional, participativa y abierta, donde todos los miembros de la comunidad se convierten en corresponsables de la transmisión de la fe. Con un enfoque práctico, ofrece pautas para organizar encuentros, oraciones, asambleas y etapas formativas que integren a niños, jóvenes y adultos, fomentando una fe compartida y viva. Es un recurso pensado para renovar la catequesis tradicional y abrirla a nuevas formas comunitarias.